La cautiva
Eugenia Castro era una muchacha morena, vivaz y sensual. Su padre, comandante de Juan Gregorio Castro, nombró por testamento tutor de su hija Eugenia, a Juan Manuel de Rosas.
Apenas adolescente, Eugenia fue ubicada en casa de una conocida familia, pero al quejarse de mal trato, Juan Manuel la llevó a vivir a Palermo, donde hacia las veces de dama de compañía de Encarnación Ezcurra, ya enferma, a quien cuidó con esmero hasta su muerte.
Cuando murió Encarnación, Juan Manuel la hizo su concubina. Sus adversarios políticos acusaban a Rosas de tenerla por esclava. Rosas la llamaba cariñosamente “La Cautiva”, pero lo cierto es que Eugenia vivía en plena libertad y decencia aunque mantenía en privacidad su relación con Rosas, y compartía gratos momentos con Manuelita y Juanita Sosa, de quienes se hizo fiel amiga.
De la relación con Juan Manuel, nacieron cinco hijos: Nicanora, Angela, Justina, Joaquín y Adrián, que aunque sin ser reconocidos fueron cariñosamente tratados por su padre con singular afecto, sobre todo Angelita, a quien le puso de sobrenombre “El Soldadito”.
Eugenia se negó a seguir a Rosas a su exilio, y cuando éste le pidió que fuera a su lado, rehusó acompañarle.
Fuentes:
- Calzada Rafael. “Cincuenta años de América”. Autobiografía.
- Ibarguren Carlos. J.M. de Rosas. Su vida, su drama, su tiempo.
- La Gazeta Federal http://www.lagazeta.com.ar/
**** La historia de esta región, que hoy comprende los partidos de Ensenada, Berisso y La Plata, y la historia de Argentina.FOTOS: plantilla y cabecera: Guillermo Hariyo.
Servicio de búsqueda personalizada

Búsqueda personalizada
Entradas más vistas en la última semana
Site Search Google
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
¿se suman?
El mundo de Olga y Daniel on Facebook
No hay comentarios.:
Publicar un comentario